Conociendo a la vid
La vid es una planta de la especie Vitis Vinifera que produce uvas para la elaboración de vino. Generalmente, conocemos poco acerca de la vid y de la ciencia que la rige conocida como Viticultura.
La Viticultura comprende un conjunto de prácticas y técnicas agronómicas aplicadas al cultivo y desarrollo de la vid, para poder obtener un vino de calidad es indispensable llevar un control sanitario de la vid durante su crecimiento dependiendo de las condiciones climáticas y ambientales que la rodean. Por lo tanto, al conocer la importancia de la vid para la producción de vinos vamos a conocer un poco más de ella y de cómo influye en la calidad del vino.
La vid está compuesta principalmente de dos partes, la primera es el pie o patrón que es un portainjerto generalmente americano (posteriormente a la plaga de la filoxera, a partir de la utilización de plantas injertadas), y la segunda es la parte aérea, denominada púa o variedad, perteneciente a especies europeas. La unión entre ambas zonas se realiza a través del punto de injerto.
El conjunto de las dos partes constituye la planta que soporta el tronco, los brazos y los pámpanos, llevando éstas últimas a su vez las hojas, los racimos y las yemas. A la planta como unidad se la denomina con el nombre de cepa, y el conjunto de plantas dispuestas de manera más o menos ordenada se le llama viña.
Hasta ahora hemos hablado de la vid en términos generales, vamos a conocer un poco más de sus partes y de la función de cumple cada una para obtener uvas de gran calidad y por lo tanto un excelente vino.
Raíz de la vid
La raíz es un órgano que crece en sentido contrario al tallo y es fundamental en la vid debido a su función de fijar la planta al suelo, así como de absorber el agua y las sales minerales necesarias para su desarrollo y acumular sustancias de reserva.
Parte aérea de la vid
La parte aérea comprende el tronco, los brazos o ramas y los brotes, denominados sarmientos o pámpanos.
Tronco
El tronco de la vid es aquel que sostiene los brazos de la cepa que tiene como funciones aislar las sustancias de reserva y llevar a cabo la conducción del agua y la savia.
Brazos, pámpanos, sarmientos, nietos y nudos.
Vamos a conocer ahora como se le denomina a las ramas de la vid según sus características. Se conoce como brazos a las estructuras responsables de conducir los nutrientes y soportar la vegetación y las flores y frutos. Las ramas jóvenes que brotan de las partes leñosas, se llaman pámpanos y los pámpanos secundarios que brotan de los anteriores se llaman nietos. Cuando los pámpanos envejecen y adquieren una consistencia leñosa y un color marrón, se conocen con el nombre de sarmientos. Cuando estos sarmientos son podados dejando sólo la parte inicial de su longitud, se da lugar a los pulgares.
Por otra parte, a lo largo de los pámpanos se encuentran unas zonas engrosadas denominadas nudos, separados por segmentos del pámpano llamados entrenudos. En estos nudos es donde brotan las hojas, y enfrente de la hoja al otro lado del nudo, puede crecer un zarcillo o un racimo.
Hojas de la vid
Como se mencionó anteriormente, las hojas se encuentran insertas en los nudos. Las hojas se componen de limbo (superficie plana de captación de luz) y pecíolo (pedúnculo de sujeción e inserción del limbo al pámpano). Es importante buscar que todas las hojas tengan las mejores condiciones de iluminación en la superficie foliar, ya que de esto dependerá fundamentalmente la capacidad productiva del viñedo.
Yemas
Las yemas son los órganos de la vid que se encuentran insertadas en el nudo, donde brotarán las primeras hojas y los racimos que pueda contener el futuro pámpano.
Zarcillos
Los zarcillos se encuentran en posición opuesta a algunas hojas que permiten a la vid trepar buscando situaciones de mejor iluminación.
Racimos e inflorescencias
Los racimos son las estructuras ramificadas que portan los órganos de reproducción y que portan las uvas. Está formado por un tallo principal llamado pedúnculo hasta la primera ramificación. Al conjunto de ramificaciones del racimo se le denomina raspón.
Flor
La flor de la vid es por lo general de tamaño reducido y color verde y pentámera. Esta es conformada por el cáliz, la corola, el androceo y el gineceo.
El fruto
El fruto de la vid se presenta como bayas de forma y tamaño variables. Las uvas o bayas de la vid se conforman de tres partes principales:
- Hollejo o piel : Es la membrana externa de la uva recubierta por una capa cerosa, llamada pruína, que se encarga de fijar las levaduras que fermentan el mosto. El color del hollejo en fase herbácea es de color verde, y a partir del envero es amarillo en variedades blancas, y violáceo en tintas.
- Pulpa: Es la parte carnosa e interna de la baya, esta representa la mayor parte del fruto. Es translúcida y rica en agua, azúcares, ácidos y aromas.
- Pepitas: Son las semillas ricas en aceites y taninos.
Conocer la vid es muy importante en la calidad del vino, debido a que permite al enólogo llevar un control de las etapas fenológicas de la vid, y así asegurar que su crecimiento y desarrollo sea adecuado.
Este aprendizaje ayuda también a tomar las decisiones necesarias en los tratamientos preventivos, poda y el tipo de análisis que se deben realizar, y así lograr que la vid reciba la iluminación adecuada y los elementos necesarios para llevar a cabo los procesos biológicos sin problema, y garantizar que la uva que se obtenga se encuentre en buen estado.
Ahora que ya conoces un poco más de la vid podrás notar su importancia en la producción de vinos y seguramente te interesará conocer más de ella, atrévete a descubrir más del gran mundo del vino. Si te interesa conocer más del mundo del vino, te invitamos a visitar nuestro sitio web World Wine Now.
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